Te hiciste la prueba y lo confirmaste: ¡Estamos embarazados! Ahora, es probable que te invadan muchas emociones y un montón de preguntas. No te apresures, tienes nueve meses para prepararte. Lo más importante para un embarazo saludable es que te sientas mentalmente tranquila.
Estos son algunos consejos que te ayudarán a empezar esta aventura con el pie derecho:
Prefiere alimentos ricos en nutrientes y vitaminas como ácido fólico, hierro, calcio y yodo, pero no en grasas. Consume una dieta equilibrada que incluya verduras, frutas, cereales, lácteos y legumbres, sin olvidar las proteínas presentes en la carne y el pescado. Bebe suficiente agua y zumos naturales de frutas.
Durante los meses de embarazo deberás evitar completamente el consumo de alcohol. Si fumas, quizás sea una buena oportunidad para dejarlo definitivamente, ya que puede poner seriamente en riesgo la salud de tu bebé. Si tomas algún medicamento, consulta de inmediato con tu médico si es seguro seguir tomándolo.
Para reforzar tu dieta, el médico te recetará uno o varios complementos vitamínicos que incluyen ácido fólico, vitaminas y minerales beneficiosos para el embarazo, como hierro, yodo, calcio, etc. Tómalos sin falta, de acuerdo a las indicaciones de tu doctor.
A menos que tu médico indique lo contrario, se recomienda realizar ejercicio moderado durante el embarazo para mejorar nuestra salud cardiovascular. Entre los ejercicios preferidos por las mujeres embarazadas se encuentran el yoga, la natación, caminata y pilates, los cuales mejoran tu condición física y te ayudan a estar mejor preparada para el trabajo de parto.
Visita regularmente a tu ginecólogo para que pueda hacer el seguimiento de tu salud y la de tu bebé. Anota las dudas que tengas y aprovecha cada visita para preguntárselas a tu doctor. No saltarte ningún chequeo te dará tranquilidad y te permitirá ir descubriendo y admirando el desarrollo de tu pequeño.
Viste prendas adecuadas para el aumento de peso y volumen que conlleva el embarazo. Evita la ropa demasiado ceñida, ya que no permite que la sangre circule correctamente, y tómate un descanso de los tacos y zapatos altos. No se trata de que vayas en pijama a todas partes, hoy en día existen muchas opciones de ropa para embarazadas. Consigue algunas prendas que vayan con tu estilo.
Los cambios hormonales durante el embarazo suelen afectar la piel y volverla más sensible. Evita recibir sol en exceso y aplica bloqueador solar en tu rostro para evitar las manchas del embarazo (cloasma). También es importante usar cremas antiestrías, para prevenir su aparición debido al estiramiento de la piel en nuestro abdomen.
El cansancio y el sueño pueden ser los primeros síntomas en aparecer y pueden estar presentes de nuevo en las etapas finales del embarazo. Procura dormir entre 6 y 8 horas todas las noches, y si lo necesitas, realiza siestas durante el día. El ejercicio moderado te ayudará a descansar y dormir mejor.
Asistir a las clases de preparación al parto te ayudará a sentirte más confiada y cómoda con los cambios que tu cuerpo experimenta. Relacionarte con otras embarazadas y compartir tus experiencias, abrirá tu mente al descubrir que no eres la única que tiene dudas o temores. En la medida de lo posible, trata de asistir a estas clases acompañada por tu pareja.
También es útil leer e informarte sobre el embarazo, las fases del parto, la higiene del bebé, la lactancia, etc. Se avecinan muchos cambios y mientras más información tengas, más preparada y tranquila te sentirás.
Alrededor del séptimo mes de embarazo, tu bebé ya será capaz de escuchar tu voz y distinguirla de otros sonidos del exterior. Es un buen momento para empezar a hablarle, ponerle música o cantarle. Esto establecerá una conexión más íntima con tu bebé y te hará sentir más cerca de él.
Recuerda, un embarazo feliz es un embarazo sano. Cuida tu cuerpo y realiza actividades que entretengan y cultiven tu mente. Aleja los pensamientos negativos y no te exijas demasiado. Ahora tu prioridad es la vida que crece en tu interior y su bienestar.